domingo, 19 de julio de 2009

La Coctelera

Acabo de hacer el viaje Barcelona-Madrid-Cuenca y vuelta. Es un viaje curioso, porque sales de Barcelona en el AVE supersonico que te deja en Madrid en 2 hora y media. Y luego haces trasbordo al Tren Regional utralento, que tarda cerca de 3 horas en llegar a Cuenca, (a pesar de estar al lado). A este Regional, algunos le llamamos “cariñosamente” La Coctelera, ya que te agitan durante todo el trayecto al ritmo del chachachá del tren. Esto es debido a que las vías, que son las mismas que pusieron cuando se inventó el ferrocarril, ya no son rectas, sino que tiene una sutil forma serpenteante.

Es difícil encontrar el lugar idóneo donde sentarse en La Coctelera y poder tener un viaje tranquilo. El vagón que menos se mueve es el segundo después de la cabina del conductor, pero como debajo va el motor, hay un ruido ensordecedor, sobre todo cuando acelera (bueno, eso es un decir). Los dos últimos vagones de cola tampoco están mal, porque normalmente van vacíos y te ahorras escuchar los cotilleos, a gritos, de la gente sobre sus amigos, enemigos y alguno que pasaba por allí. Luego está el problema del aire acondicionado, pues cada vagón es independiente y te encuentras unos tipo congelador industrial y otros tipo horno a presión; el termino medio todavía no lo han logrado. Pero sin duda los peores vagones son los que van unidos por esos fuelles gigantes, si te sientas en uno de estos vas bailando y saltando durante todo el trayecto. Es como viajar en un Vibro-Power, que es un aparato gimnástico en el que te subes encima y te hace vibrar para perder grasa corporal sin esfuerzo, también es posible que descoloque algún órgano interno, aunque eso no lo dicen en el anuncio.

En este último viaje me recorrí todo el tren buscando el lugar ideal, no lo encontré y me conformé con el menos malo. Eso si, lo bueno que tiene La Coctelera es que viaja poca gente, entonces puedes tener cuatro asientos para ti sólo: uno para sentarte, otro para la maleta y los de enfrente para estirar los pies. Así te puedes instalar cómodamente y dejar que el ritmo del tren invada tu cuerpo.

Precisamente, estaba pensando el otro día que La Coctelera va vacía porque no la saben publicitar. Si en vez de llamarlo Tren Regional, lo llamaran Tren Vibro-Power y lo anunciaran como:
“El único tren capaz de hacerte perder peso sin esfuerzo.”
Trayecto Madrid-Cuenca: 2 kilos y medio.
Trayecto completo Madrid-Valencia: 5 Kilos.
“Súbete al Tren Vibro-Power y consigue una estupenda silueta mientras viajas”
Descuentos de ida y vuelta. Y de regalo: una caja de aspirinas, un bote de reflex y un bocata de chorizo (para compensar).

Ya lo estoy viendo, será la bomba. Si alguno todavía no habéis pasado por la experiencia única de montar en La Coctelera, hacedlo antes de que se convierta en el tren de moda.