Anoche soñé que encontraba unos zapatos de tacón de aguja en un cajón de mi cuarto. Yo no uso tacones, porque me parecen instrumentos de tortura; además como mido 2,10 metros, no me hacen falta. Entonces, en el sueño, llamo a una amiga, que sí los usa, para que venga a probárselos. Le explico que habían aparecido en mi cajón de repente. Entonces ella me pregunta: “¿Te han devuelto ya lo de la declaración de la renta?” Y yo le digo que no. “Ah, pues va ser eso, - me dice- es que ahora con la crisis, lo hacen así”. Entonces me desperté, agobiada, pensando que cualquier día se podía colar un inspector de hacienda en mi casa, para dejarme unos zapatos en un cajón. Joder, Qué pesadilla tan absurda!
El sueño me dejó muy preocupada, y cuando estoy así me distraigo haciendo chorradas. Por eso hoy he creado un grupo de esos de “Señoras” en el Facebook. Se llama Señoras que escuchan a Queen porque son monárquicas. (He puesto un fotomontaje y todo, de esos que tanto gustan a la casa real). Me hacía mucha gracia imaginar a una señora, con rulos y bata de guatiné, pasando el aspirador al ritmo de I want to break free, cantándola en inglés inventaó y parándose de vez en cuando para hacer observaciones tipo: “Uhh, qué vozarrón que tiene la reina, madre de Dios!”
Pero ha sido difícil crear un grupo de señoras que no existiera ya. Las señoras hacen de todo en el Facebook: Se ponen una bolsa en la cabeza cuando llueve, se guardan las mejores bragas para cuando van al médico, quedan para andar, van paseando y se paran en seco para dramatizar la conversación, se pegan y se empujan por conseguir algo gratis, discuten para ver quien está más enferma, nadan sin mojarse la cabeza para no estropearse el peinado, empujan a Benedicto XVI y lo tiran al suelo, cantan alto en misa, echan la tarde en el ambulatorio, se ponen la chaqueta sin usar las mangas, etc, etc… Son el nuevo fenómeno de Internet. Incluso hay un tipo que ha hecho un corto que se llama Señoras, el corto. (No se ha quebrado mucho la cabeza buscando un título).
A mi todas estas señoras me recuerdan a la tía Laura, una tía de mi madre que tiene 315 años y sigue viva. La tía Laura hace todo lo de las señoras del Facebook, y además cotillea todo lo cotilleable, (cada vez que te ve, te hace un interrogatorio), anda muy rápido, habla más rápido todavía y dice todo el tiempo: “Uhhh” (Bueno, en realidad, es lo único que se le entiende). La tía Laura es “La señora”. Deberían hacer una serie sobre ella en TVE donde se liase con un cura. Sí, ya se que ya hay una serie sobre eso, pero con ella de protagonista tendría más gracia.
En fin, supongo que todos conocemos una tía Laura que hace esas cosas del Facebook, hay muchas tías Lauras en este país. La duda que yo tengo es ¿acabaremos igual que ellas o es una cosa generacional? El otro día, estuve a punto de preguntarle a un niño en el ascensor aquello de: “¿Y tu de quien eres, majo?” Afortunadamente no llegué a hacerlo. Sin embargo estoy muy preocupada, porque escuché a unas señoras en el metro decir: “cómo está la juventud!”, refiriéndose a unos adolescentes que hablaban a gritos y escuchaban música horrible desde su móvil, y estuve de acuerdo con ellas. ¡Dios mío, me estoy convirtiendo en una señora! ¡Acabaré colándome en la cola del pescao, saliendo en bata y zapatillas a comprar el pan, guardándome el pañuelo en el sujetador y peinándome como David Lynch! Y para colmo, seguro que un inspector de hacienda entra en mi casa, me roba la pensión y me deja en su lugar unos zapatos de tacón, que no podré ponerme porque tendré juanetes! Que suene el despertador! Que suene el despertadooor!
3 comentarios:
Jajajaja, muy bueno. Yo también a veces me siento como una "señora"
Je je je je
Buenísimo!
Gracias por las risas que me he echado!
Yo espero y lucharé por no ser como ellas...seré de "Las Otras"
Es muy duro luchar contra la marujicidad. Ay¡
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